Es abrumante LA CANTIDAD de mujeres que sufrieron abusos, de todas las edades, en cualquier año, día, hora, lugar, y clase social. Tengo muuuchas amigas que sufrieron, las escuché y contuve en mi adolescencia y adultez. Siempre con temor, culpa y en silencio. NO NOS CALLAMOS MÁS.