- Qué ocurre, bro, te noto...
- No es nada, tío
- En serio, te noto muy triste, man
- No... -solloza- no sé...
- Está bien, amigo puedes llorar
- Gracias, -rompe a llorar- gracias...
- No pasa nada, hermano. A llorar a la llorería
- ¿¡Cómo!?
- Yo soy tu llorería, bro
- Bro...